----- Original Message -----

From: Fundacion Mujer Y Futuro

 

 http://www.youtube.com/watch?v=7AO3KHWWVzY

 

MOVILIZACION  NACIONAL DE MUJERES AL PUTUMAYO

 

 

 

LAS MUJERES PAZ HAREMOS

Movimiento de mujeres contra la guerra
“Campaña por la desmilitarización y recuperación de la vida civil”
Comunicado de prensa No. 9


“Porque éticamente es posible
y realizable un país y una casa
sin guerra y sin violencias

 

Carmen Allauca,  líder social del Municipio de Lago Agrio provincia de Sucumbíos- Ecuador y Nancy Obregón, Representante de la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios de las Cuencas Cocaleras del Perú compartirán este 25 de noviembre los efectos de las fumigaciones con glifosato en sus países. Ellas se unen a la iniciativa de tres mil mujeres colombianas de caminar y mirar hacia el sur.

 

La movilización al Putumayo está respaldada por un conjunto de personas y organizaciones norteamericanas, europeas y latinoamericanas que al igual que nosotras creen que las fumigaciones con glifosato viola un derecho humano vital: La VIDA misma.

 

“Que esta lucha de todas y todos sea amplia en horizontes y podamos mirar juntas, con nuestros ojos, y podamos decir juntas, con nuestras voces diversas que la esperanza y el drama que viven y sufren las comunidades y mujeres del Putumayo, son similares a la esperanza y al drama que viven y sufren las mujeres y comunidades ecuatorianas de nuestra frontera en las afectadas provincias de Sucumbios y Carchi, impactadas por la lluvia de muerte, por el glifosato y el roundup ultra, por la errática política de fumigaciones, por las ofensivas militares en Colombia, por la sinrazón de todos los actores armados...”

 


“... Queremos construir con ustedes, mujeres de Colombia, los elementos centrales de una política antidrogas desde el Sur, que  sea integral, propia, latinoamericana, que propenda también- al debate, sin ambages, autocensuras o vergüenzas, sobre la posibilidad de consensuar en el planeta la descriminilización o despenalización del consumo de drogas, cuya punidad ha sido fuente de toda corrupción, mafia y argumento para la injerencia militar en estas tierras durante  21 años...”

 

La anterior es una invitación de las mujeres y hombres de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos APDH, y del Grupo Civil de Monitoreo de los Impactos del Plan Colombia del Ecuador. Es una invitación no sólo para las mujeres colombianas, es también una invitación para las mujeres bolivianas, venezolanas, brasileras, peruanas, es una invitación a mujeres de todas las latitudes, mujeres de oriente y occidente, mujeres del norte y del sur.

 

Este 25 de noviembre, mujeres negras, mestizas, indígenas, mujeres ecuatorianas, bolivianas y peruanas compartiremos maneras distintas de interpretar la realidad.


Informes:
Iniciativa de Mujeres por la paz –
Mesa Nacional de Mujeres –
Ruta Pacífica de Mujeres –

Irma Ortiz A. Comunicadora-  comunicaciones[at]rutapacifica.org.co

 

 

 

 

 

Movimiento de mujeres contra la guerra

“Campaña por la desmilitarización y recuperación de la vida civil”

Comunicado de prensa No. 10

 

 

 

 

“Porque éticamente es posible

y realizable un país y una casa

sin guerra y sin violencias”

 

 

 

 

Tres mil mujeres nos vamos en Ruta Pacífica y en movilización social, no sólo la palabra irá con nosotras, también serán nuestros compañeros de viaje los símbolos representados en el color,  la música, el gesto, la pintura, el silencio.  Les llevaremos a nuestras amigas del Putumayo, a sus familias y a sus comunidades semillas como símbolo del alimento; simularemos avionetas que esparzan semillas para que su territorio vuelva a ser fértil; simbólicamente uniremos telas de colores que significarán verdad, justicia, reparación, esperanza y resistencia.

 

Nuestro viaje tendrá momentos que también dirán lo que pensamos y expresarán lo que queremos.

 

Primer momento:

Desde cada lugar del que partiremos hacia el Putumayo se realizará un corto acto de mujeres de negro y contaremos:

“Nos vamos en Ruta Pacífica desde todos los lugares del  país a denunciar los efectos de la guerra en el Putumayo, en la vida de las mujeres y en la población civil.  Nos vamos a acompañar a nuestras hermanas del Putumayo para que juntas denunciemos los efectos de la política antinarcóticos y los efectos de las fumigaciones”.

 

Segundo momento:

Estamos viajando, combinaremos el sueño con la admiración del paisaje. La diversidad ambiental nos llega por los sentidos. Cantaremos, escucharemos cuentos e historias que nos llevarán de la mano a  esta otra parte de país, que nos acercarán al Sur.

 

Tercer momento:

Las caravanas de los diferentes lugares se encuentran. Las mujeres de Bogotá, Antioquia, Chocó, Cartagena, Pereira, Bucaramanga, Neiva y Tolima nos encontraremos en ESPINAL.

Mientras tanto las mujeres del sur, Cauca y Valle se juntan en POPAYÁN.

 

 

Cuarto momento:

Las dos grandes caravanas se abrazarán en MOCOA, allí todas las mujeres nos tomaremos la plaza principal y en un acto de mujeres de negro le contaremos a la capital del Putumayo que allí estamos, somos tres mil mujeres diciendo al unísono NO A LAS FUMIGACIONES.

 

Las mujeres del Cauca y del Valle del Cauca nos compartirán el ritual de las mujeres indígenas, medicas tradicionales para invocar la protección de las mujeres y la población civil del Putumayo.

 

Quinto momento:

Es 24 de noviembre y hemos llegado a Puerto Caicedo. La música nos recibe, los abrazos nos envuelven y seguramente la risa y el llanto se apoderará de nosotras las mujeres. Estamos alegres, hemos llegado. Nos recibirán las mujeres de este municipio con sus banderas blancas y la banda de paz.  Aquí iniciaremos el plantón de mujeres de negro en donde entregaremos nuestro presente a las amigas de Putumayo.  Serán las muñequitas verdes, hechas a mano, las vasalisas que las protegerán.

 

Sexto momento:

25 de noviembre, día mundial de la no violencia contra la mujer.  Es un día lleno de sorpresas, mujeres negras, indígenas y mestizas nos tomaremos:

 

-          Seis de la mañana, nos sumergiremos en el río para convocar la verdad, la reparación, la justicia, la esperanza y la resistencia civil de las mujeres.

 

-          Nos tomaremos la calle central del municipio de Puerto Caicedo, es una gran marcha simbólica. Con nuestros símbolos del no a las armas,  con nuestras ollas y las avionetas de cartón esparciendo semillas para que el alimento nunca falte.

 

-          La palabra es nuestra.  En un acto académico mujeres liderezas de Perú, Ecuador y Colombia narrarán desde sus propias experiencias cuáles son los efectos que ellas, sus hijos/as, sus comunidades han padecido por las fumigaciones, igualmente harán propuestas.

 

-           Luego será la lúdica la que nos convocará en la plaza principal.  Las payasas sin fronteras y las manifestaciones artísticas de las diferentes delegaciones de mujeres de todo el país llenarán de color y risa el Putumayo, risa que  resonará  en todo el país y el mundo entero.

 

Octavo momento: La Despedida

26 de noviembre, estamos de regreso a nuestros lugares de origen.  Hemos recorrido las carreteras de nuestro país, hemos dicho con la palabra y el símbolo que existen otras alternativas, otras miradas sobre una misma realidad.  El Movimiento de Mujeres contra la Guerra ha dicho y seguirá diciendo NO ROTUNDO A LA GUERRA Y A LAS VIOLENCIA. NO A LAS FUMIGACIONES. NO A LA MILITARIZACIÓN DE LA VIDA.

 

 

Informes:

Iniciativa de Mujeres por la paz –

Mesa Nacional de Mujeres –

Ruta Pacífica de Mujeres –

Irma Ortiz A. Comunicadora comunicaciones[at]rutapacifica.org.co

liaisa[at]epm.net.co

 

 

 

Movimiento de mujeres contra la guerra

“Campaña por la desmilitarización y recuperación de la vida civil”

Comunicado de prensa No. 13

 

 

 

“Porque éticamente es posible

y realizable un país y una casa

sin guerra y sin violencias”

 

 

Hoy martes 25 de noviembre Día Internacional de la No Violencia contra las Mujeres, 3000 mujeres del Movimiento de mujeres contra la guerra, marcharemos por las calles de Puerto Caicedo en solidaridad con la población Putumayense.

 

La esperanza reverdeció nuevamente desde el dia de ayer con nuestra llegada a la ciudad de Mocoa, con el recibimiento masivo que las mujeres putumayenses, con sus banderas blancas nos regalaron.

En un gesto de bienvenida  el alcalde  Miguel Antonio Ruano nos entregó las llaves de la ciudad nombrándonos huéspedes de honor.

 

 

 

Movimiento de mujeres contra la guerra

“Campaña por la desmilitarización y recuperación de la vida civil”

Comunicado de prensa No. 14

 

                                                                        “Porque éticamente es posible

y realizable un país y una casa

sin guerra y sin violencias”

 

 

 

 

 

 

 

Mujeres de todas las edades y todos los colores, mujeres negras, indígenas, mulatas, magas, heroínas, abuelas, madres, adolescentes. Mujeres que retaron sus propias fuerzas y decidieron recorrer el país para demostrarle a sus compañeras del Putumayo que no están solas, se reunieron el 25 de noviembre en Puerto Caicedo, Día del No a la Violencia contra la Mujer, e hicieron un llamado a que se modifique la actual política antinarcóticos.

 

Tres mil mujeres, que llenaron de esperanza y optimismo a una comunidad que ha sido golpeada por la violencia y la destrucción, le manifestaron al Putumayo y al país entero su deseo por que los suelos de esta región vuelva a ser fértiles y alimento de sus hombres y mujeres. Ellas, con fuerza de conjuro, expresaron sus deseos en la siguiente declaración:

 

 

 

DECLARACION DEL MOVIMIENTO DE MUJERES CONTRA LA GUERRA

EN SU MOVILIZACION AL PUTUMAYO

 

 

Lo Ilícito

Es La Guerra,

El Desplazamiento,

El Desarraigo,

Las Fumigaciones,

La Destrucción y

El Miedo

 

Hoy en la conmemoración del 25 de noviembre, día internacional del No a la Violencia contra las Mujeres, nos movilizamos mujeres de  muchos rincones de Colombia para expresar nuestra solidaridad con las mujeres y las comunidades del Putumayo.  Nosotras, Movimiento de Mujeres Contra la Guerra, hemos emprendido este viaje para expresar un NO ROTUNDO A LA GUERRA y  LAS VIOLENCIAS privadas y publicas.

 

Hoy  te saludamos y abrazamos mujeres del Putumayo,  en gesto solidario y de protección. Llegamos para decirles que   no están solas.  Que nos sentimos parte de la realidad  que ustedes viven.

 

Llegamos hasta aquí para expresar nuestra sororidad con las mujeres del Putumayo y del sur de Colombia, con las comunidades indígenas witotos, ingas, sionas y kamsás, con las mujeres afrodescendientes, con las campesinas y campesinos, y con las y los habitantes de los cascos urbanos de esta tierra.

 

Está hoy aquí  con nosotras Esperanza, la mujer integrante de la Organización Femenina Popular de Barrancabermeja, asesinada por los paramilitares el 16 de Octubre de este año y están también aquí muchas otras mujeres del país y el mundo  quienes nos acompañan con su energía y solidaridad. Ni Esperanza, ni nuestras esperanzas han muerto, hoy están más vivas que nunca.

 

Nosotras como Movimiento de Mujeres Contra la Guerra enlazadas solidariamente hemos decidido hacer este recorrido para recuperar  con ustedes este territorio que les ha sido arrebatado por las guerras a lo largo de la historia. Queremos caminar  con ustedes por estas tierras,  porque caminar por los  territorios es  una forma  de recuperarlos para las comunidades, para las mujeres y hombres que lo habitan desde la expresión civil no violenta.

 

Putumayo te sentimos  región llena de mixturas, región donde conviven mujeres y hombres  venidos de todos los rincones del país y de otros países de frontera.

 

Putumayo, sabemos como dice la escritora Rocío Verónica Borja, que “han roto tu vestido, tú piel se está quemando, te están bañando con veneno y tus poros se están tapando. Hoy tu vientre ya no alberga la semilla que germina, sino las víctimas de la guerra que la mala hierba termina, en tus bosques ya no residen los animales silvestres, sino ejércitos armados que hacen daño a la gente”

 

Putumayo también sabemos que las organizaciones de mujeres y comunitarias de esta región han  planteado la sustitución racional y gradual de los cultivos de uso ilícito, de forma que eviten  daños humanos y ecológicos a nuestra selva amazónica.

 

Por eso nosotras mujeres,  venimos nuevamente a denunciar públicamente los efectos del negocio Internacional y nacional de la droga, el negocio y control  del mercado de los cultivos de uso ilícito y la política antinarcóticos y de fumigaciones, así como la disputa territorial entre diversos actores armados que deja a las mujeres y las  comunidades sin opciones, en medio de la guerra  y sin posibilidades de poder construir una región y una vida digna.

 

¿Cómo podemos callarnos ante el genocidio que se está cometiendo con las mujeres y comunidades indígenas como producto del conflicto armado y la política antinarcóticos?.

 

¿Cómo aceptar que hoy precisamente se esté negociando con los grupos paramilitares la total impunidad frente a sus actos atroces?

 

¿Cómo callarnos  mientras los grandes capos del narcotráfico nacional e  internacional están libres,  mientras 170 mujeres campesinas e indígenas de esta región están siendo procesadas por la ley 30?

 

¿Como nos podemos callar  ante los efectos devastadores del  Plan Colombia?

 

Putumayo,  hemos llegado hasta aquí porque queremos que tus suelos  vuelvan a ser  fértiles y alimento para tus  mujeres y hombres.

 

 Hoy venimos en resistencia no violenta,   tejiendo nuestra solidaridad, la memoria, la verdad,  la justicia, la reparación y la esperanza de construir un país libre de violencias.

 

Hace más de un año el Movimiento de Mujeres Contra la Guerra movilizó cerca de 40 mil  mujeres hacia la Plaza de Bolívar en la ciudad de Bogotá. Allí demandamos al presidente Alvaro Uribe que se comprometiera ante las mujeres colombianas con una política de estado a favor de la búsqueda de salidas políticas y negociadas para el conflicto armado.

 

Hoy 25 de noviembre del año 2003 con la presencia de 3 mil mujeres provenientes del Putumayo, Cauca, Nariño Valle del Cauca, Caquetá, Risaralda, Tolima, Huila, Santander, Barrancabermeja, Bolívar, Atlántico, Choco, Antioquia y Bogotá, en Puerto Caicedo, nos reafirmamos en nuestras propuestas y queremos   a nivel nacional e internacional expresar:

 

¡     Rechazamos el tratamiento criminal  del que está siendo víctima la población de toda esta región y reivindicamos que los productores/as de la hoja de coca, sean tratados como tales, no como narcotraficantes y/o como actores armados.

 

¡     Denunciamos ante el país y la comunidad internacional la política militarista del actual gobierno el cual privilegia el uso de las armas y la fuerza para tratar problemáticas sustentadas y generadas en la pobreza, en la expropiación histórica, la marginación y la ausencia de gobernabilidad.

 

¡     Exigimos que las mujeres y los hombres del Putumayo puedan tener una voz propia y una incidencia en las decisiones en que las que se está jugando su vida, su salud, la de sus hijos e hijas y de la tierra que les da sustento.

 

¡     Que se detengan las fumigaciones  que están deteriorando la salud y la vida de toda esta población y acabando con el ambiente y con los cultivos tradicionales y alternativos.

 

¡     Demandamos un acuerdo humanitario que proteja los derechos básicos de la población civil y de las mujeres en particular. El gobierno no puede  continuar siendo cómplice del genocidio que se está cometiendo con las comunidades indígenas y campesinas de este territorio.

 

¡     Exigimos al estado y a los diversos grupos económicos, así como a las empresas multinacionales presentes en nuestro país asumir su responsabilidad social  de los costos de la construcción de la paz, demostrando su voluntad política en una salida negociada al conflicto armado.

 

¡     El estado colombiano, en cabeza de su gobierno, debe asegurar y garantizar el derecho a la vida humana, animal y vegetal, a la integridad personal y a las condiciones de vida dignas de la población. El Estado debe promover políticas incluyentes para todos los sectores de la población, que aboguen por soluciones pacificas, que rescaten la defensa de la vida e integridad de las comunidades, que fortalezcan el tejido social, que empoderen a las mujeres y  promuevan procesos reales de desarrollo regional, en aras de generar un desarrollo humano sustentable y sostenible.

 

¡     Exigimos al gobierno colombiano se instale inmediatamente la comisión de investigación científica,  basadas en la sentencia del Tribunal Superior de Cundinamarca y referida a las fumigaciones con aspersión aérea, en relación con los efectos que el glifosato y otros componentes químicos y biológicos tienen en la salud de los seres humanos  y en el sistema ecológico.

 

¡     Que se construyan  escenarios de negociación internacional que activen el debate acerca de la corresponsabilidad de los países  consumidores y contemplar la alternativa de la legalización de la droga.

 

¡     Que se constituyan comisiones de veedurías ciudadanas, de orden nacional e internacional, que hagan el  seguimiento a los efectos de la política antidrogas,  la política de fumigaciones y Plan Colombia.

 

 

 Putumayo, 25 de Noviembre del 2003

 

RUTA  PACIFICA DE LAS MUJERES 

INICIATIVA DE MUJERES  POR LA PAZ

MESA NACIONAL DE CONCERTACIÓN DE  MUJERES

 

Las Mujeres Pazharemos Movilizándonos contra la  Guerra

 

Putumayo, 25 de Noviembre del 2003

 

RUTA  PACIFICA DE LAS MUJERES 

INICIATIVA DE MUJERES  POR LA PAZ

MESA NACIONAL DE CONCERTACIÓN DE  MUJERES

 

Informes:

Iniciativa de Mujeres por la paz – 310.268.27.92

Mesa Nacional de Mujeres –310-262-08-12

Ruta Pacífica de Mujeres – 310.503.83.44

 

 

Irma Ortiz A. Comunicadora 310.503.83.14  comunicaciones[at]rutapacifica.org.co

 

 

 

Movimiento de mujeres contra la guerra

“Campaña por la desmilitarización y recuperación de la vida civil”

Comunicado de prensa No. 15

 

                                                                        “Porque éticamente es posible

y realizable un país y una casa

sin guerra y sin violencias”

 

 

Las Mujeres de Negro de Barcelona, Valencia y Madrid se manifiestan en solidaridad con la Movilización de Mujeres al Putumayo

 

Las Mujeres de Negro de las ciudades de Barcelona, Madrid, y Valencia realizaron en el día de ayer, 25 de noviembre, día Internacional  de la No Violencia contra las mujeres, su ritual de Plantones de Mujeres de Negro como muestra de solidaridad y apoyo a las tres mil mujeres colombianas del Movimiento de Mujeres contra la Guerra que marcharon por las calles de Puerto Caicedo en el Putumayo.

 

Consignas como “Ni un hijo más, ni un día más, ni un peso más para la guerra”, “Las mujeres colombianas queremos vivir y sin violencias”;

”Fumigación igual a miseria” ; “ Las mujeres no parimos hijos e hijas para la guerra” y “Las Mujeres Paz Haremos” se escucharon ayer en las principales ciudades de España, en las voces de mujeres solidarias con la comunidad putumayense afecta por el abandono estatal y por los impactos de las fumigaciones con glifosato de la política antinarcóticos colombiana.

   

 

Recibimos la solidaridad de organizaciones de todo el mundo

 

Mujeres y hombres de España, Bélgica, Canadá, Francia, Jerusalén, Venezuela, Ecuador, Chile, suiza, Brasil, Uruguay, Bolivia, manifiestan su acompañamiento a la Movilización de Mujeres al Putumayo.

 

 

Les compartimos algunos mensajes...

 

Barcelona, a 11 de noviembre de 2003-11-25

 

Al Movimiento Nacional de Mujeres contra la Guerra : Ruta Pacífica de las Mujeres Colombiana, Organización Femenina Popular, Mesa de Concertación  Nacional de Mujeres, Iniciativa de Mujeres por la Paz.

 

Queridas amigas y amigos:

 

Desde la Mesa Catalana por la Paz y los Derechos Humanos en Colombia, nos queremos hacer presentes entre ustedes a través de este escrito reconociendo y apoyando su valerosa iniciativa de Movilización de mujeres al Putumayo.

 

Se hace necesarias iniciativas como la de ustedes. Estas recuerdan a las instituciones políticas, organismos internacionales, medios de comunicación y, sociedad civil, la existencia de otro tipo de estrategias más eficaces y creativas para enfrentar los conflictos basadas en la implantación de políticas de respeto al DH y DIH, así como de las libertades civiles y sociales.

 

Nos solidarizamos con la población del Putumayo que se encuentra en un contexto triplemente bélico, los efectos de la guerra, de las fumigaciones y, de la pobreza. Sobretodo, nos solidarizamos con ustedes, las mujeres (el 70% de la población desplazada), ya que sabemos que estas condiciones de violencia contra ustedes aumenta.

 

... Por tanto desde este otro lado del océano, les reiteramos nuestro compromiso por acompañarlas en este difícil pero seguro y gratificante caminar.

 

 

 

Taula Catalana Per i Els Drets Humans a Colombia

 

Amnistia Internacional, Catalunya, Ayuntamiento de Barcelona, Ayuntamiento de Sant Cugat, Cooperaccio, Diputación de Bacelona, Entrepueblos, Federación Catalana de ONGs para el desarrollo, Pagesos Solidaris, Payasos Sin Fronteras, Escuela de Cultura de la Paz y Solidaridad, Fundación Joseph Comaposada, Fundación para la Paz, Generalitat de Catalunya, Intermon-Oxfam, Justicia y Paz. 

 

 

 

 

 

Bélgica, 23 de novembre de 2003-11-25

 

Estimadas amigas y hermanas: 

 

Desde Bélgica, en nombre de la Coordinación por Colombia de Amnistía Internacional Vlaanderen ( Parte norte de Bélgica) enviamos nuestros más cálidos saludos a las tres mil mujeres, que emprenderán la Ruta Pacífica, la caminata de vida al Putumayo para abrazar y apoyar a las comunidades putumayenses, afectadas por las fumigaciones.

 

No podemos estar presentes físicamente en la marcha, pero a pesar de la gran distancia geográfica seguimos luchando con ustedes por la “desmilitarización y la recuperación de la vida civil”, por los Derechos Humanos y sobre todo el derecho a la vida digna e integral...

 

Abrazos,

 

Sus Van Olmen

 

Equipo de Coordinación por Colombia de Amnistía Internacional Vlaanderen (Bélgica).

 

 

Desde Canadá la organización Kairos: Iniciativas Ecuménicas Canadienses por la Justicia escribe:

 

Toronto, 24 de noviembre de 2003

 

Apreciados compañeros y apreciadas compañeras:

 

Reciban nuestros saludos solidarios y calurosos desde Canadá...Respaldamos y nos identificamos con los propósitos de esta movilización:

 

·   La desmilitarización de la vida civil y recuperación de la vida democrática.

·   Respeto irrestricto a los derechos humanos y al DIH

·   La visibilización de los efectos del conflicto armado y plan Colombia en las vidas y los cuerpos de las mujeres del sur de Colombia.

 

Admiramos el coraje, creatividad y tenacidad en su resistencia contra la guerra y en la construcción de un nuevo país con justicia social y paz. Les ratificamos nuestro compromiso de seguir acompañándolas en la creación de un país donde haya respeto por la vida, los derechos humanos y la justicia económica y social.

 

Queremos que sepan que las tendremos presentes en nuestras oraciones y pensamientos en estos días de movilización y durante toda su lucha.

 

En solidaridad,

 

Mary Corkery, Directora Ejecutiva

 

Bill Fairbairn, Coordinador, Derechos Humanos.

  

 

  

 

 

Así, nos han llegado también manifestaciones de apoyo y acompañamiento de mujeres independientes que en varias ciudades del mundo se suman, a través de sus mensajes de solidaridad, a la marcha de tres mil mujeres al putumayo. Queremos resaltar la comunicación de Maria Piedad Gómez Osaba, que nos escribió desde París y que recoge en sus palabras, el sentimiento de muchas de las mujeres que nos acompañan de corazón.

 

 

“Les pido a todas las mujeres que marchan hacia el Putumayo, que me lleven en sus pasos y en cada latido de su corazón.

 

Les pido a todas las mujeres que marchan hacia el Putumayo: a la mestiza, la blanca, la indígena, la mulata, la negra, la maga, la heroína, a ustedes, a nosotras, que tengan presente que aunque no tengamos el mismo trajinar somos la misma mujer.

 

De no olvidar que ser mujer es soñar, crear, reflexionar, actuar, correr como el río y subir hasta las nubes, regresar como lluvia sin dejarse acaparar, transformar la historia y combatir por un ideal.

 

“Nuestras voces se escucharan y juntas construiremos futuro”.

 

Maria Piedad Gómez Osaba. Paris, noviembre /2003