Dibujos infantiles

Una  mirada asombrada ante la capacidad de los adultos de destruir la tierra que los alberga y da su sustento.

Desafortunadamente la niñez colombiana no se puede desligar de la guerra fraticida que vive Colombia desde hace 5 décadas. La mayor parte de los colombianos nacimos, crecimos y no conocemos más país que aquel que se debate por autodestruirse, y el "no conflicto interno" colombiano es cada vez más sanguinario y omnipresente en nuestras vidas y actos. Nuestros niños ven y viven esta guerra como su cotidianidad. En el mejor de los casos, aquellos niños que aún están un poco a salvo de las repercusiones de las armas, 'solamente' la sufren en su imaginario (juegan al secuestro; sueñan con ser carne de cañón: paras, guerrilos y soldados; y otros juegos y sueños de no futuro...). En lo que se refiere a la medida estrella de la guerra del Estado en contra del país —las fumigaciones— nadie se escapa de sus repercusiones. Este bombardeo intenso de potentes mezclas químicas en los campos colombianos nos afecta a todos pues contamina lo que comemos y bebemos todos los habitantes del país. Nos dicen que es porque los químicos de los narcotraficantes contaminan...Sin embargo, esta insensatez de los adultos no se escapa a la mirada infantil. Es así que aquí quisimos presentar algunos dibujos que reflejan la incomprensión infantil y la forma como los niños del campo proyectan en sus dibujos y sus palabras la ilegitimada de una administración gubernamental que los agrede y destruye su salud, comida y animales.

Seguramente, así pasará la Administración Uribe a la historia de la poca patria que quede.....